Entrevistas forenses (formalmente conocidas como SAIN)

El objetivo de una entrevista forense es obtener una declaración de un niño que puede haber sufrido abusos. La entrevista se lleva a cabo de una manera sensible al desarrollo, imparcial y en busca de la verdad que apoyará la toma de decisiones precisas y justas en los sistemas de justicia penal y bienestar infantil.

Mediante una serie de preguntas no capciosas, el entrevistador evalúa las capacidades de desarrollo, emocionales y comunicativas del niño. La entrevista se realiza a un nivel acorde con las capacidades de desarrollo del niño.

Tres propósitos de la entrevista forense:

  1. Minimizar el trauma de la investigación para el niño.

    Dado que el niño debe hablar con extraños y puede describir detalles extensos, la investigación puede resultar perturbadora. El trauma se minimiza disminuyendo el número de veces que se entrevista al niño y proporcionándole un entrevistador sensible y con conocimientos.

  2. Mantener la integridad del proceso de investigación.

    El objetivo de la entrevista forense es proporcionar información para la toma de decisiones en tres áreas: protección del menor, aplicación de la ley y servicios de apoyo. En consecuencia, la información recopilada es sensible a la forma de interrogatorio permitida en cada área.

  3. Para minimizar la contaminación de la memoria del niño sobre el suceso o sucesos.

    El entrevistador utiliza técnicas que obtienen información correcta y evita preguntas que puedan inducir, influir, cambiar o contaminar el recuerdo que el niño tiene del suceso o sucesos.

El Multi-
Equipo disciplinario:

Según sea necesario, los representantes de los organismos responsables de investigar las denuncias de maltrato infantil observan la entrevista, realizada por un Especialista en Entrevistas Forenses a Niños, en un circuito cerrado de televisión. Representantes de los organismos responsables de la investigación de las denuncias de maltrato infantil observan la entrevista, realizada por un Entrevistador Forense de Niños, que será observada por el MDT en una sala diferente en circuito cerrado de televisión. Entre estos representantes se incluyen: la policía local y/o estatal, un defensor de víctimas y testigos de la oficina del fiscal del distrito, un ayudante del fiscal del distrito y una enfermera pediátrica SANE del Departamento de Salud Mental. En algunos casos, puede haber un investigador del Departamento de Niños y Familias, de la Comisión de Protección de Personas Discapacitadas, del FBI o del HIS.

Formación y cualificación de los entrevistadores forenses:

Los entrevistadores forenses deben tener como mínimo una licenciatura en el campo de los servicios humanos, la justicia penal o el derecho. Tienen varios años de experiencia trabajando con niños y adolescentes maltratados. Los entrevistadores forenses están especialmente formados y tienen experiencia en hablar con niños sobre temas difíciles sin causarles más traumas. Reciben una formación amplia y continua para poder recabar información de los niños de una manera neutral y que determine los hechos, que sea también adecuada desde el punto de vista del desarrollo y de la cultura, y jurídicamente correcta. Los entrevistadores forenses deben tener como mínimo una licenciatura en trabajo social, psicología, servicios humanos, justicia penal o un campo relacionado.

Los nuevos entrevistadores reciben una formación intensiva y se someten a un proceso continuo de revisión inter pares.